Para entender mi barrio, desde sus zonas verdes y el arbolado, primero me tengo que remitir a un programa de arborización de Bogotá, y los cambios que se han hecho en la localidad de Usaquén, para luego localizarme en El contador.
El mantenimiento de la arborización cobro vital importancia ya que el árbol se
Constituye en elemento fundamental del mobiliario urbano.
Un proyecto que se emprendió para el ordenamiento de la cobertura arbórea de la cuidad, mediante el Decreto 984 de 1998, efectuándose hasta las fechas de hoy hacen parte del “Programa de arborización de Bogotá” con el objetivo de seleccionar especies adecuadas para el medio urbano y rural con fines técnicos de siembra y manteniendo esto para armonizar con la nueva vegetación garantizando la permanencia de arboles maduros, (obedeciendo a criterios estéticos y paisajísticos) para de esta forma mantener una identidad social y cultural de la ciudad y que especies nativas a futuro suministren beneficios ambientales, por otra parte se trabaja la combinación de siembra de nuevos árboles con la sustitución de especies inadecuadas que causan daños, afectan redes de servicio público y se encuentran en malas condiciones. (Urapanes, Pinos, Acacias y Eucaliptos), son algunas de las especies taladas.
Varias instituciones distritales, comunidades organizadas, empresas privadas y ciudadanía en general hacen parte del desarrollo del programa. La responsabilidad de algunas instituciones como la del “Jardín botánico” que se le otorga el manejo integral del arbolado de Bogotá efectuando un inventario y la georreferenciación a través de un Censo de arbolado Urbano del Distrito Capital elaborado el año pasado.
El desarrollo de la nueva arborización ha estado condicionada a factores ambientales (propias del clima local y su afectación a determinada especie), espaciales (en el adecuado emplazamiento del árbol, calidad del sitio y mantenimiento, que logre aminorar los riesgos de afectación futura al equipamiento urbano) y sociales (relacionados con las preferencias de determinados grupos urbano estratos, localidades, etc.)
Según CALDAS las especies seleccionadas deben responder a los siguientes requisitos:
Crecimiento medio
Talla proporcional
Simetría y regularidad en el sistema estructural, y altura conveniente de
Las primeras ramas
Sistema radicular
Permanencia del follaje
Forma de la copa y área de sombra que proyecta
Facilidad de limpieza y mantenimiento
Resistencia al ataque de plagas y enfermedades
El mantenimiento de la arborización cobro vital importancia ya que el árbol se
Constituye en elemento fundamental del mobiliario urbano.
Un proyecto que se emprendió para el ordenamiento de la cobertura arbórea de la cuidad, mediante el Decreto 984 de 1998, efectuándose hasta las fechas de hoy hacen parte del “Programa de arborización de Bogotá” con el objetivo de seleccionar especies adecuadas para el medio urbano y rural con fines técnicos de siembra y manteniendo esto para armonizar con la nueva vegetación garantizando la permanencia de arboles maduros, (obedeciendo a criterios estéticos y paisajísticos) para de esta forma mantener una identidad social y cultural de la ciudad y que especies nativas a futuro suministren beneficios ambientales, por otra parte se trabaja la combinación de siembra de nuevos árboles con la sustitución de especies inadecuadas que causan daños, afectan redes de servicio público y se encuentran en malas condiciones. (Urapanes, Pinos, Acacias y Eucaliptos), son algunas de las especies taladas.
Varias instituciones distritales, comunidades organizadas, empresas privadas y ciudadanía en general hacen parte del desarrollo del programa. La responsabilidad de algunas instituciones como la del “Jardín botánico” que se le otorga el manejo integral del arbolado de Bogotá efectuando un inventario y la georreferenciación a través de un Censo de arbolado Urbano del Distrito Capital elaborado el año pasado.
El desarrollo de la nueva arborización ha estado condicionada a factores ambientales (propias del clima local y su afectación a determinada especie), espaciales (en el adecuado emplazamiento del árbol, calidad del sitio y mantenimiento, que logre aminorar los riesgos de afectación futura al equipamiento urbano) y sociales (relacionados con las preferencias de determinados grupos urbano estratos, localidades, etc.)
Según CALDAS las especies seleccionadas deben responder a los siguientes requisitos:
Crecimiento medio
Talla proporcional
Simetría y regularidad en el sistema estructural, y altura conveniente de
Las primeras ramas
Sistema radicular
Permanencia del follaje
Forma de la copa y área de sombra que proyecta
Facilidad de limpieza y mantenimiento
Resistencia al ataque de plagas y enfermedades
“En concordancia con el Decreto 984/98, como entidad responsable del Programa de arborización del Distrito se designó al Jardín Botánico de Bogotá “José Celestino Mutis”, y las competencias para adelantar tratamientos silviculturales en el espacio público se distribuyeron de la siguiente forma: el Instituto de Desarrollo Urbano IDU tenía la competencia del manejo de la arborización en vía pública, el Instituto Distrital para la Recreación y Deporte IDRD era el encargado del manejo de la cobertura arbórea en parques, la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá EAAB era responsable de los tratamientos silviculturales en zonas de ronda y/o manejo ambiental de ríos, quebradas y canales y CODENSA se encargó del manejo del arbolado que interfería con las líneas de conducción eléctrica de alta y media tensión. En espacio privado la responsabilidad recayó en el Departamento Técnico Administrativo del Medio Ambiente DAMA”.
Una vez entendido el programa, paso a la recopilación de datos estadísticos según las localidades y el cobertura arbórea que se ha realizado.
Una vez entendido el programa, paso a la recopilación de datos estadísticos según las localidades y el cobertura arbórea que se ha realizado.
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